Nombre completo: Emilie Nichole Amherst
Apodos: Emi, Em.
Fecha de Nacimiento: 15 de enero
Edad: 103/19 años
Nacionalidad: Francesa
Grupo: Vampiros impuros
Rango: Filosofía
Orientación Sexual: Heterosexual Curiosa

De tez clara, mide un metro con setenta y dos centimetros (1,72 m). Cabello largo con pequeñas ondas o a veces liso, color castaño claro, aunque depende de la época en la que viva, a veces lo puede tener rubio y otras veces castaño oscuro. Ojos claros, azules aunque también parecen cambiar a verde, suelen llamar la atención de la gente, ya que son grandes y demasiado expresivos. Labios carnosos, rojos debido a su alimentación. Nariz fina que encaja a la perfección con la forma de su rostro. No se considera delgada, sólo es proporcionada a lo que corresponde a su altura, tiene una muy buena condición física.

Emilie es una chica algo perezosa, prefiere mil veces quedarse en su cama viendo televisión que estar salir a comprar. No obstante, no para todo es perezosa, en lo que a deportes se refiere es una chica muy activa, le gusta hacer todo tipo de deportes que hagan que la adrenalina fluya por sus venas. Aunque desde que se convirtió en vampiro ya nada es lo mismo.

Es muy alegre y divertida, siempre esta bromeando con la gente. Es muy buena amiga, le gusta ayudar a los demás, también le encanta escuchar los problemas de los demás, siempre pensó que debió estar estudiando psicología, pero no lo hizo porque dando consejos no es muy buena, ya que no sabe como comportarse como un adulto, ella siempre será una niña y vivirá bromeando por toda la eternidad.
Es muy paciente y le encanta leer e incluso a veces escribe un poco, pero es demasiado vergonzosa para mostrarselo a alguien, sólo deja sus escritos en su pequeño diario (del cual nadie sabe).

A pesar de ser una chica alegre, también tiene su lado triste, y estos ocurren cuando las gotas de lluvias golpean el suelo. La nostalgia de días pasados la golpean, todo lo que es ella cambia radicalmente, se queda en silencio leyendo algún libro.
Cuando tiene problemas no le gusta pedir por ayuda, es muy testaruda y orgullosa, por lo que no importa cuan apretada este la soga en su cuello, ella seguirá luchando sola hasta que logre superar el obstáculo.

Era invierno en Nord-Pas-de-Calais, al norte Francia, cuando Anne Amherst comenzó el trabajo de parto. Un nervioso padre, como cualquier primerizo, corría de un lado para otro en la sala de espera, consultando a cada minuto si su pequeña niñita ya había llegado a este mundo. El parto de Emilie no fue fácil, tuvieron variadas complicaciones por lo que se demoró más de lo planeado en nacer. Cuando ya eran las 11.15 p.m del día 15 de enero, la pequeña Emi por fin abrió sus pequeños ojos.

Madre e hija estuvieron un par de días más en el hospital, sólo para asegurarse que todo estuviera en perfectas condiciones. Pasados esos días ambas llegaron al hogar, donde un muy feliz padre y esposo las recibió con regalos y mimos.

La infancia de Emilie no fue gran cosa, era hija única por lo que se le consentía en todo. Su padre era un exitoso empresario que pasaba más de viaje que con la pequeña niña, aunque eso no significaba que no la quería o algo parecido, de hecho era todo lo contrario, Emi era los ojos de su padre, todo lo que hacía él era para ella y para su futuro. Emilie era un joven muy alegre, tenía muchos amigos y todos parecían admirarla debido a la fácil relación que tenía con los demás, ya fueran grandes o pequeños. Era una chica muy extrovertida, que le gustaba bromear con la gente, aunque claro de vez en cuando aparecía alguien que no le gustaba que lo molestaran, esto se vio reflejado algunos años más tarde.

La adolescencia fue algo difícil, sobre todo para Anne quien al no tener el apoyo constante de su marido se vio obligada a ser la “mala” de la película. Ella era quien castigaba a Emi, cuando se portaba mal o no cumplía con el horario de llegada, incluso cuando no hacía su tarea. No obstante, a pesar de tener bastantes discusiones por los castigos y discursos sobre el buen comportamiento, Anne y Emi se adoraban. Para Emilie su madre era su apoyo principal en quien podía confiar y sabía que siempre iba a contar con ella para todo.

Hasta ese entonces todo parecía un cuento de hadas en la vida de la joven de ojos claros. No obstante, una noche salió con sus amigos a un bar que quedaba en el centro de la ciudad, sabía que su madre le había dado permiso hasta la medianoche por lo que planeó su noche para poder disfrutarla al máximo. Cuando ya estaban en el local, un tipo muy apuesto se acerca a hablar con ella, conversaron y bailaron durante mucho tiempo; Emilie no se dio cuenta de la hora, ya eran pasadas las doce cuando se percato de la hora que era. Rápidamente salió del lugar, y a los segundos sintió como alguien corría a su lado. Era el chico con el que había estado toda la noche, caminaron con lentitud hasta llegar a su hogar.

Comenzaron una linda amistad, aunque Emilie sabía que algo le ocultaban, ella era muy perceptiva y podía darse cuenta que su amigo no era alguien normal. Una tarde de septiembre ella dejó de ser humana. Los jóvenes estaban tranquilamente conversando a la orilla de la playa, cuando el tema de los vampiros salió en la conversación. Emilie pensaba que era una broma, una broma de mal gusto, pero no fue así. El joven estaba decidido en convertirla en uno de ellos y a la chica no le quedo otra opción que aceptar, no quería morir.

Fue algo difícil, le costó mucho tiempo acostumbrarse a su nueva vida, pero lo más difícil fue alejarse de su familia, dejó a sus padres con el corazón roto y con una familia que se desfragmentaba a pedazos por su culpa. De vez en cuando los visitaba desde la lejanía, aún no se permitía entrar a ese hogar ya reconstruido, tenía un hermano al cual nunca llego a conocer.

Un par de siglos más pasaron y los eternos jóvenes decidieron que separarse era lo mejor, Emilie ya podía controlar mejor su sed y sus habilidades. Vago por todo el mundo, aprendió nuevas culturas y descubrió que la filosofía era una de sus pasiones. Es así, como llego a Heaven Academy, aburrida de seguir viajando por el mundo decidió que era mejor ocupar su tiempo en estudiar y aprender de aquello que tanto le gustaba.

Otros datos

* Ama a los animales, en especial a los gatos, tiene uno llamado Milkshake
* Le gustan las noches estrelladas y tranquilas, en las cuales reflexiona sobre lo que ha hecho en su vida
* En los días de lluvia le encanta sentarse cerca de una ventana, escuchando el sonido de las gotas al caer al suelo
* Leer es uno de sus hobbies favoritos, puede pasar días leyendo libros, de todo tipo, pero sus favoritos son aquellos que la hacen pensar.
* Sabe tocar la guitarra, pero hace decenas de años que no toma una
* Muerde las puntas de su cabello cuando esta nerviosa
* Es demasiado observadora.